Como un Cambote, un sonido muy acústico, terrenal. La percusión de Sebastián Saposnik quien le pone su herencia adquirida gracias a sus viajes por el mundo, en especial a su contacto con la percusión africana que le pone ese sabor y color a tierra, la guitarra de Enio Escauriza que va desde lo clásico al Bossa Nova pasando por un golpe tocuyano y Fedora Mora que vuelve a lo básico y al silencio, es una mezcla bien orgánica.